El estilo Japandi es una nueva tendencia de interiorismo que está ganando notoriedad y adeptos. Lo primero que tenemos que saber es que se trata de una mezcla entre la decoración japonesa y el estilo escandinavo.
El término en sí es un juego de palabras entre Japan de japanese y di de scandinavian.
Todo surge debido a los viajes a japón en siglos pasados por parte de artistas y diseñadores daneses en busca de inspiración, los cuales acabaron por verse influenciados de la estética tan enigmática del diseño hogareño en Japón, donde coincidían en aspectos como los elementos naturales, la sencillez.
Como resultado de esta fusión obtenemos interiores minimalistas y limpios que a la vez resultan ser cálidos y acogedores lo cual nos lleva a una atmósfera hermosa en la cual la paz y la armonía de la decoración Zen se une en equilibrio con la decoración escandinava.
Se puede decir que incluso se trata de una filosofía de vida, en la cual se tiene un profundo respeto y estima por los elementos hechos a mano, la reutilización, el pensamiento ecologista y la búsqueda de paz y tranquilidad.
Y es que si partimos de la filosofía de ambas partes, tanto la filosofía wabi-sabi de japón como el concepto hygge de Dinamarca están comprometidos con la simplicidad.

¿Cómo conseguir un estilo Japandi para nuestro hogar?
Este estilo persigue diseños minimalistas por lo que se aleja unilateralmente de lo excesivo, tenemos que partir por trasladar todo a su calidad esencial, logrando simplicidad, el cual es el centro por el que parten tanto el estilo japonés como el escandinavo.
En este diseño aparece un marcado efecto de calma, equilibrio y sosiego, es en efecto el zen de todos los elementos, desde los materiales, el mobiliario, los revestimientos, los colores y accesorios.
Deberemos establecer zonas de flujo despejadas para crear ese ambiente relajado, hacer uso de muebles con líneas simples, rehuyendo de aquellos otros que estén muy ornamentados, queremos aquellos que sean más limpios.
Nuestro consejo es que los muebles han de combinar maderas claras pertenecientes al estilo escandinavo con otras más cálidas típicas del estilo Japonés, con esto se da lugar a un ambiente en armonía y natural.
La madera, el bambú y la cerámica son ideales para los muebles ya que transmite la sensación de pureza, además de los tejidos empleados, como son el algodón, el lino u otro tipo de fibras que sean naturales, y también se ha estado incorporando otros aspectos del entorno natural como es la incorporación de plantas, las cuales se deberán colocar estratégicamente donde prima la calidad a la cantidad.
Los paneles “shoji”, un elemento más que podemos incorporar , ya que se trata de un claro ejemplo de los interiores japoneses los cuales se encargan de separar los espacios con la mínima interrupción visual, los cuales dejan pasar la luz.

Conclusión
Como repaso, recordemos que los pilares que sostienen este estilismo son los materiales, donde apostamos por lo natural, la utilización de plantas en el interior ya que ese toque verde nos será de ayuda para crear armonía, los colores, los cuales serán neutros, jugar con el contraste recordando no utilizar aquellos colores que resulten estridentes, la amplitud, creando fluidez entre los espacios, y la sencillez, recordemos que en el Japandi menos es más.