Seguro que has pensado mil veces en hacer una reforma en casa pero nunca te lanzas a hacerla. Tranqui, es lo normal, una reforma integral es un paso importante a realizar, ya que es una inversión importante que debemos de tener premeditada.
Para dejar tu casa como realmente quieres tienes dos opciones. La primera de ellas es ir realizando pequeñas reformas en casa para ir adecuando tu baño o cocina a como realmente quieres que sea. El problema de ir haciendo pequeñas reformas es que tardarás años en tener la casa como realmente quieres y siempre tendrás que estar haciendo reformas, ya que cuando la tengas como quieras ya habrá pasado de moda y la querrás con otro estilo.
La solución ideal es la segunda, la reforma integral. Una reforma integral es una reforma completa. Al realizar este tipo de reformas conseguirás rehabilitar al completo tus estancias, creando zonas más amplias y funcionales.
6 consejos a tener en cuenta al realizar una reforma integral
Piensa primero en qué hay que hacer
No hace falta que pienses en como solucionar estos problemas al reformar tu vivienda, de esa parte ya se encarga el arquitecto o el decorador.
Cambio temporal de vivienda
Dependiendo del tipo de reforma integral que realices en tu vivienda deberás de plantearte la posibilidad de tener que cambiar de vivienda durante la reforma.
El polvo, el ruido o el paso de gente en la vivienda pueden hacer que sea difícil convivir con las obras, por lo que si tienes la posibilidad de abandonar la casa durante las obras sería una opción muy buena.
Busca unos buenos profesionales
Conseguir una empresa de reformas profesional que nos haga el trabajo con buena calidad y buen precio no es una tarea realmente fácil. Lo que debes de hacer es fijarte en los proyectos que han hecho las empresas de reformas, pedir presupuesto y fijarte bien en la calidad y el precio.
Pide presupuesto y compara entre las diferentes opciones que tienes y que más se ajusten a lo que habías pensado.
Si algo no te gusta, dilo
Es importante que participes en la obra en cierta manera, ya que, si dejas a la empresa trabajando y desapareces durante un mes, ellos mismos tendrán que tomar decisiones sobre tu vivienda que después pueden no convencerte. Visita las obras para ver como va la reforma de cuarto de baño, de la cocina o de cualquier habitáculo en el que se trabaje.
Busca ser partícipe en la obra, pero sin estar ahí todo el día como los señores que se sientan a ver las obras en la calle. Di lo que te parece bien y lo que no, ya que al fin y al cabo la casa es tuya y solo tú sabes cómo quieres que sea el resultado final.
Aprovecha las ayudas
Aprovecha las ayudas de las Comunidades Autónomas, que pueden llegar a cubrir hasta el 40% de la obra. Hay diferentes ayudas que te cubrirán cierta parte de la eliminación de barreras arquitectónicas, renovar instalación de agua, luz o electricidad, mejorar el aislamiento, aumentar la superficie útil…